Era el más poderoso y el más rebelde de todos los reptiles invocados por Orochimaru. No toleraba que nadie le diera órdenes e incluso pedía tributos a cambio de su ayuda. Su especialidad consistía en estrangular a sus víctimas más grandes o en intentar comerse a las más pequeñas. Fue invocada por Orochimaru en su combate contra Jiraiya y Tsunade. Después, Sasuke también la invocó en su combate contra Deidara, para hipnotizarla y huir con ella a otra dimensión. La autodestrucción de Deidara le dio de lleno a Manda antes de que pudiera huir y esto aparentemente la mato.