Al principio de la serie se mostró como uno de los personajes más gruñones y malvados. La primera vez que lo hemos visto fue cuando atropella a Naruto previó al examen Chuunin, donde dio a conocer su carácter y demostrar que no era para nada débil. Desde el principio se noto que le tenía miedo a su hermano Gaara por sus contantes instintos asesinos (aún más sabiendo la bestia que el tenía dentro), aunque siempre intentaba calmarlo para evitar conflictos extra.
Kankuro se caracteriza por usar tecnicas con marionetas (Kugutsu no Jutsu) dentro de las cuales se destacan Karasu Kuroari y Sanshou (marionetas creadas por el Akatsuki Sasori). Estas marionetas aprendió a manejarlas desde muy joven con su chakra. Comenzó a usar a Karasu como su principal arma, a la que revestía con su propio aspecto para engañar a los rivales. 
Una vez comenzado el examen Chuunin el Kazekage encargó a Kankurou,Temari,Gaara y Baki una misión. Como aliados de la villa del Sonido, tenían que presentarse al examen Chuunin y llegado el momento, ayudar a Orochimaru en la invasión de la villa de la Hoja. Kankurou se enfrentó a Misumi y lo derrotó con mucha facilidad. Cuando, en la siguiente ronda, le tocó luchar con Shino, decidió rendirse para no mostrar sus técnicas. Una vez comenzó el combate de Gaara, éste se volvió inestable y perdió el sentido. Kankurou y Temari huyeron con el. Shino fue el encargado de pelear contra Kankuro. Shino logró vencerle con sus insectos. 
Un tiempo después, cuando Naruto y los demás fueron a rescatar a Sasuke, Kankuro ayudo a Kiba a vencer a Sakon y Ukon en su faceta 2. Kankuro mostró su nueva marioneta Kuroari y demostró haber mejorado mucho su técnica.
En Shippuden se lo ha visto pelear poco, pero cuando Deidara raptó a Gaara Kankuro salió corriendo a salvar a su hermano. Esto le costo estar al borde de la muerte, pero logró ser salvado por Sakura y pudo ver como Naruto y los demás salvaron a su hermano.
Ya en la Cuarta Gran Guerra Ninja Kankuro fue el primero en combatir ni más ni menos contra Sasori y Deidara. Estos se burlaron de el porque pensaron que seguía siendo un don nadie pero Kankuro mostró su nuevo arte: Sasori en marioneta. Con este nuevo títere, logra vencer y sellar a los dos espíritus revividos por el Edo Tensei
Kankuro ha demostrado ser una nueva persona, más amigable y confiable que al principio de la serie.